Capitulo 3
Recuento de los daños
Parte 1
Recuento de los daños
Parte 1
-Solo era una misión de reconocimiento- sus pensamientos le llevaban a ese momento, los ojos color olivo se entre cerraban, le costaba respirar - Solo era un reconocimiento de los hechos. – volvía a repetirse, su inhalación era pesada, le costaba respirar, debía controlarse.
Escena del Crimen Informe
Reporte con independencia del tipo militar científica en la Escena del crimen, La investigación comprende para la preparación de los Cabos Básicamente las fases:
Primera fase. PROTECCION y preservación del lugar de los hechos.
Segunda Fase. Recopilación de la información preliminar.
Tercera Fase. Observación, valoración y planificación
Cuarta Fase. Fijación del lugar de los hechos.
Quinta Fase. Búsqueda y tratamiento de las evidencias
Sexta fase. Liberación del lugar de los hechos
Séptima fase. Documentación y remisión de evidencias.
Los soldados de Primera realizaron varias de las fases que se han dictaminado anteriormente, Asegurando, preservando y protegiendo el lugar de los hechos hasta la llegada de la Unidad Especializada forense Técnico Científica.
Procedieron asegurar la identificación de testigos, personas implicadas y personal actuante. La policía como los médicos ha sido de gran ayuda para la investigación pertinente. El lugar de los hechos primero intervino la fuerza policíaca, al igual que se realizaron por parte de ellos una labor técnica científica para su investigación. Al momento de reconocer por su ADN al militar, la fuerza intervino. Este es el informe que muchos de los altos mandos tienen al respecto antes de la intervención militar.
Ahora la protección del lugar fue hecha después por la milicia, tanto las actuaciones y medidas que estuvieron destinadas para proteger preservar se continuaron con el estándar correspondiente. Así que el personal técnico científico asumió el control de los hechos, teniendo jerarquía extraordinaria del material previamente encontrado y clasificado por la fuerza militar.
Al momento de tener conocimiento del caso, la Unidad Especializada forense Técnico Científica acudió al lugar con la mayor rapidez posible. Comprobando el delito que se realizo con el Militar. Empezaron lo necesario para realizar en los siguientes victimas las pruebas correspondientes. De la misma forma despejaron los lugares de los hechos, restringiendo el acceso y desalojando a los curiosos. De esta forma no se contaminara las evidencias.
-Y el documento sigue… y sigue… - interrumpía el informe- Este es el protocolo establecido para cualquier investigación en curso, establecida para la Milicia Forense. Generala Beifong, dígame en sus propias palabras. ¿Cómo es que se perecieron los elementos de su unidad, si usted estaba al mando?- arrojo el informe el informe en su escritorio el Teniente del Cuerpo Jurídico del Ejercito Azulon- La corte militar espera- Volteaba a ver a la mesa donde estaba la Generala Beifong con impaciencia - Usted Generala Lin Beifong es la persona que recae toda la responsabilidad, de este fracaso en el nuevo proyecto forense que Usted ha insistido por muchos años instalar en la Milicia. Debía dirigir y coordinar a su tropa, siempre tomando medidas necesarias para su protección. Ellos tenían que encontrar al culpable de las víctimas, no volverse ser víctimas en una escena del crimen.- Espero la contestación de la Generala Beifong.
-El secretario del Cuerpo Jurídico del Ejército, pide la palabra- se escucha en el altavoz.
-Teniente del Cuerpo Jurídico del Ejercito Azulon, Recuerde que esta es una audiencia de informe militar, no es un proceso militar en contra de la Generala de División Beifong.- Se le quedo mirando en la mesa del Tribunal Militar.
- Yo creo que debería serlo- Contestaba molesto.- No solo hubo fallas en el protocolo de seguridad, sino además de victimas las unidades del ejército al mando de la Generala de División Beifong. – Se les quedo mirando.- ¿No creen que debe existir una sanción o por lo menos una explicación a los acontecimientos ocurridos en ese día?, Las familias de cada elemento lo piden.
-El secretario del Cuerpo Jurídico del Ejército, vuelve a tomar la palabra- se escucha en el altavoz.
-Teniente del Cuerpo Jurídico del Ejercito Azulon, se le vuelve a recordar que usted llego solo como una petición para escuchar el informe, no ser parte del la Mesa del tribunal militar ni menos abogado demandante.- El teniente Azulon se le quedo mirando- Ya que su relación en el caso es personal, no puede ni debe estar hablando de mas en este tribunal, menos intentar presionar a la mesa del tribunal militar para dictaminar una sanción.
- Entiendo Secretario- El Teniente Azulon fue a sentarse y a recoger la información obtenida por el momento.
-Tomando en cuenta toda la situación al momento la Mesa del Tribunal Militar se reunirá mañana a las 13 horas.- dictamino el juez primario del Tribunal Militar- Generala de División Beifong esperamos mañana su informe sin interrupciones.
- Así será Juez – Teniente del Cuerpo Jurídico del Ejercito Wun respondía por La Generala de División Beifong.
- De pie, el Tribunal Militar se retira.- La voz en el altavoz anunciaba.
Los presentes al informe todos militares fueron saliendo por las puertas. Solo se quedo El Teniente del Cuerpo Jurídico del Ejercito Wun, La Generala Beifong y El teniente Azulon.
El hombre se levanto para acercarse a ellos.
- Beifong no olvides cuántos muertos por tu culpa…- empezaba a elevar la voz cada vez que hablaba.- No se quedara así. Han sido muchos muertos Beifong, eres una desgracia para la milicia, una cobarde.- El Teniente Wun alejo al Teniente Azulon de ella.
- Cállate hombre- Con un movimiento lo alejo lo mas que pudo. – No sabes lo que dices.
- No me vuelvas a tocar- La mirada del Teniente estaba llena de odio y tristeza.- Ni siquiera había un cuerpo.
Se acomodo su uniforme, paso sus manos por el cabello volviendo a tranquilizarse.
- No se saldrá con la suya.- La miro furioso- Si la justicia no llega por parte de los militares, lo hare publico, no importa si me cuesta mi puesto- Agarrando su portafolios salió dando un portazo.
Mientras La Generala de División Beifong no se había movido de su lugar ni dicho nada en todo ese tiempo, ella seguía con su presencia fuerte, pero por dentro estaba destrozada.
Todas las palabras del Teniente se lo decía a sí misma una y otra vez.
Su mente todavía estaba en shock, sabia las consecuencias de hacer estos informes al Tribunal Militar, todo lo sucedido seria una carga pesada pero era necesario hacerlo.
No estaba de acuerdo La Capitana y médica del ejército La doctora Kya sobre apresurar su recuperación todavía debía reponerse físicamente y mentalmente ante los hechos sucedidos.
El teniente Wu agarro la silla de ruedas donde estaba la Generala de División Beifong, recorriendo el pasillo hasta llegar al vehículo oficial, gracias a los inventos de las Industrias Futuro, podía colocar la silla de ruedas en el automóvil sin que ella tuviera que hacer nada.
Sabía sentir que su cuerpo todavía estaba cansado, estaba al corriente que su recuperación llevaría tiempo así que debía ser paciente.
Mientras que El Teniente Wu conducía llevándola nuevamente al hospital, podía verse caer unas gotas en el parabrisas. El silencio en el trayecto le ayudara aclarar sus ideas realmente agradecía que el Teniente Wu no la interrogara. Al llegar al Hospital Militar El teniente Wu volvió trasladarla adentro del complejo. Pasando la lista de entrada y regresarla a su cuarto personal.
-Regresare por ti mañana- Mirándola desde la puerta- Aun con el reporte escrito, si se necesitara tu testimonio para que este en acta.
- Lo entiendo- menciono calmadamente la Generala Beifong- Mañana nos vemos.
El Teniente Wu cerró la puerta dejándola sola en la silla de ruedas. Lin uso sus manos hasta llevar la silla al ventanal la lluvia se había intensificado.
-Solo era una misión de reconocimiento de la zona, ¿Qué podía pasar de malo?- Movió su rostro hasta apoyarla con su mano cerrada. -
Lin Beifong se quedo pensando en el Día DD. Era indescriptible, volver a escuchar dentro de ella los gritos. Abrió la mano para intentar alejar las lágrimas que derramaba. Esos chicos no tenían posibilidad alguna. Nadie la tenia, ni ella siendo Maestra de Metal.
Tan ensimismada estaba que no escucho cuando abrían la puerta, ni en el momento que sentía una mano posando delicadamente en su hombro, pudo sentir el calor de su mano, alejándola de sus recuerdos más dolorosos.
- Capitana y médica del ejército...La doctora Kya- menciono La Generala Beifong- No la escuche entrar.
- Por favor, Lin solo diga mi nombre cuando estemos solas, ¿No habíamos acordado eso?- Su presencia calmaba el agitado corazón.- Fue un día duro lo entiendo, es muy pronto para salir Lin, necesitas descansar y recuperarte.- Empezó su revisión médica a las heridas que tenia Lin en su cuerpo.
- Me convocaron, debía ir- Menciono Lin sacando el aire retenido de sus pulmones.- Era mi deber estar ahí.- Le volteaba a ver, sus ojos estaban sumamente entristecidos. Kya y ella habían establecido una fuerte unión de confianza de paciente a doctor. Beifong no dejaba lucir sus sentimientos tan fácilmente- Todo fue rápido, no pude dar mi informe, iré mañana.
Aun con el Agua control, los huesos rotos debían sanar en su tiempo, el problema era el daño mental que podían tener los pacientes en un combate, esto podía tardar años en recuperarse, mas si su internación estaba en las infraestructuras militares, le recordaban constantemente los sucesos de que disparaban El Síndrome de estrés Postraumático. Esto lo sabia Doctora Kya, por el informe que le dio El Teniente Wu de este día, entendió que La Generala Beifong no podría enfrentar al Teniente Azulon por el simple hecho de que ella seguía en shock y se culpaba de lo sucedido, junto con la amenaza del mismo de crearle dificultades a futuro.
Ella fue la Doctora General en la sana de Urgencias del Ejercito, que le atendió a su llegada, mientras estaba medicada para quitarle el dolor La Generala balbuceaba inconsciente todo el suceso, lo cual sorprendió a muchos de los que estaban en el cuarto de sanación. La Doctora Kya intervino advirtiéndole a todos que debía callar lo que habían escuchado.
La Generala de División Beifong al despertar quería volver a la acción. La Doctora Kya tuvo que intervenir en varias ocasiones para prácticamente obligarla a quedarse internada. En los siguientes días, la paciente Lin empezó a tener pesadillas y recuerdos involuntarios en muchos momentos del día, esto se le llamaba Rememoración del Trauma y sabía que tendría que pasar tiempo para que Beifong se repusiera por completo.
Una de las secuelas que vio en ella fue que los episodios sus lecturas aumentaban, palpitaciones, dificultad para respirar, sudor extremo cuando alguien entraba en su visión, ya fueran cadetes o cuerpo de seguridad, se disparaba mas la Ansiedad extrema en las noches. Esto llevo a la Doctora Kya a llevarla a un cuarto privado alejándola de conversaciones con los militares investigadores, en fin alejarla generalmente de cualquier cosa que podría alterar su recuperación.
Después de aislarla, La doctora Kya empezó el tratamiento para ver cómo estaban sus recuerdos, solo que en muchas ocasiones no recordaba detalles del día, muchas cosas importantes las había olvidado o las tenia bloqueadas dentro de ella. En otros días, la sintió distante ante toda aproximación de las personas que iban a visitarla, como su hermana Suyin. Al platicarle ella de su vida cotidiana para ver si quería hacer alguna cosa en particular o sus gustos La Generala Lin realmente no le importaba, no lo tomaba significativo y cortaba la sesión.
En las guardias que le toco a la doctora ver el progreso de Lin, veía solo signos de hiperactividad, tenía dificultades para dormir, maltrataba al personal. Y especialmente en las noches se alarmaba con mucha facilidad cuando había ruidos en la zona.
En todo este tiempo La Doctora Kya con especialistas le daban sesiones de agua control para aliviar muchos de los síntomas además de la curación de su cuerpo. Observaba como le ayudaba hasta el punto de ver a sus ojos más tranquilos. Lo bueno de estar en una instalación militar es que hasta que no se firmara el doctor general del caso, el paciente no podía irse así que La Generala Beifong debía acatar las instrucciones que le daba La Doctora Kya.
Recordaba como las primeras sesiones de meditación con Lin, la irritabilidad y la negación de tomarlas, tuvo que amenazarle diciéndole que si no se comportaba, la dejaría por 1 año sin firmar su salida. La psicoterapia empezó con enseñarle las técnicas básicas de relajación.
Se rio cuando Lin le mencionaba en varias ocasiones cuando le decía que ella respiraba bien que eso no debían enseñarle. Pero con un poco de esfuerzo y paciencia Kya le enseño a respirar correctamente, esto a la larga le ayudaría a Lin controlar su crisis que le provocaba el síndrome de estrés postraumático.
Ahora que estaba estable le dio a su jefe superior su recomendación de seguirla manteniendo en aislamiento para que mejorara su condición. Lo que no esperaba fue que la milicia por la presión de las familias y el Teniente Azulon intervinieran con una investigación.
Por lo que El Teniente Wu le menciono La Generala de División no perdió la compostura, pero al entrar al cuarto podía ver cómo le había afectado estar ahí escuchando las palabras del Teniente Azulon.
-Lin- volvía apretar con la mano el hombro de la mujer.- Debes tener cuidado, aun cuando has mejorado con el tratamiento, no sabemos si tendrás un episodio- se agacho para estar a la altura de la Generala- Quiero que sanes y estés bien, Lin.- Elevo su mano a la mejilla de Beifong dándole una caricia suave.
- Kya lo que tenga que pasar mañana pasara, no puedes protegerme todo el tiempo- cerro los ojos por la caricia dada de Kya los abrió nuevamente con mirada seria.- Tiene razón el Teniente Azulon, si necesitan respuestas las tendrán, aun si no me puedan creer.-
- Eso es lo que me temo- respiro hondo para luego sacar el aire de sus pulmones.- No puedes cargar con la culpa…
- Yo era su Generala al mando, claro que era mi responsabilidad.- soltó fuertemente Lin.- Mi división fue destruida tan fácilmente.- dejo de mirarla para ver el ventanal, Kya se levanto- Jamás me lo perdonare. Si debo pagar dándome de baja en el ejército, que así sea.
- Lin…Eso también le tengo miedo, que no puedas perdonarte- Con sus manos agarro la cabeza de Lin, dándole un suave beso en sus labios, Lin se quedo perpleja sintiendo algo tan cálido tocando su piel.
Al momento que cerró sus ojos dejo de sentir los labios de Kya solo escucho la puerta de la habitación cerrarse quedándose sola en la fría habitación de hospital.
Comentarios
Perdón por la tardanza, andaba creando algunos dibujos para ayudarme a trazar la historia. Algunos están en el Tumblr otros todavía ando creándolos. Vean también la pagina Trinidad de Sangre